Supuesta influencer reta a mujer vulnerable a saltar a un lago sin saber nadar para después abandonarla.

Natalie Reynolds, una influencer conocida en TikTok por sus videos virales, enfrenta las consecuencias de sus actos después de que la plataforma le cerrara su cuenta de manera permanente. El motivo: un polémico video en el que se burlaba de una mujer en situación de calle y con problemas de salud mental.  

En las imágenes, Reynolds retó a la mujer vulnerable a saltar hacia un lado por 20 dólares. La persona, sin saber nadar, accedió al desafío, mientras la influencer grababa la escena. Sin embargo, al darse cuenta de la gravedad de la situación, Natalie huyó del lugar sin ayudar.  

El video, calificado como cruel y denigrante, desató una ola de indignación entre usuarios y organizaciones defensoras de derechos humanos. Ante las masivas quejas, TikTok actuó rápidamente, eliminando el contenido y suspendiendo la cuenta de Reynolds por violar sus políticas contra el acoso y la humillación pública.  

Lágrimas por su cuenta, no por su víctima

Días después de la suspensión, Reynolds fue grabada llorando frente a las oficinas de TikTok, suplicando que le devolvieran su perfil. Alegó que su cuenta era su "única fuente de ingresos" y que dependía de ella para mantener su estilo de vida. Sin embargo, muchos usuarios criticaron que su arrepentimiento no surgió por empatía hacia la persona afectada, sino por haber perdido sus patrocinios y su fama en redes.  

Las reacciones en línea no se hicieron esperar: "No es víctima, es una oportunista que solo llora porque perdió dinero", comentó un usuario. Otros celebraron la decisión de TikTok, señalando que el contenido de odio y la explotación de personas vulnerables no deben tener espacio en las redes sociales.  

Hasta el momento, TikTok no ha respondido a las súplicas de Reynolds, y su cuenta permanece eliminada. Mientras tanto, el caso ha reavivado el debate sobre la responsabilidad de los creadores de contenido y los límites del humor en las redes sociales.